Los modelos de fuentes de ósmosis se adaptan a entornos abiertos como interiores. Los modelos de fuentes de acero inoxidable encajan a la perfección en zonas de exterior y zonas más expuestas a la polución. Mientras que los modelos de fuentes de red se ajustan mejor a viviendas y zonas de interior.
Dentro de las múltiples tecnologías de filtración de agua se encuentra la ósmosis. La tecnología de ósmosis inversa empleada es el sistema de filtración doméstico más eficaz para aguas que requieran mucho tratamiento para ser potable. Funciona a través de un proceso de 4 filtros, que se recomienda cambiar cada año, y una membrana, con cambio en 3 o 4 años.
Este proceso de filtros se compone de :
- Filtro Sedimentos 5 micras. Ayuda a eliminar las partículas más pequeñas (de hasta 5 micras de grosor) y sedimentos que contiene el agua. Esto permite eliminar la turbidez del agua, así como retener todo tipo de sólidos.
- Dos filtros de carbón activo. Eliminan el cloro y otros productos químicos que contiene el agua. Además reducen los sabores y olores.
- Postfiltro remineralizador. Remineraliza e incrementa el PH del agua. Este es el último filtro por el que pasa el agua, después de haber sido tratada por los otros tres.
La ósmosis inversa se diferencia principalmente de otros sistemas en la membrana osmótica, la cual realiza una filtración de metales pesados (mercurio, nitratos, aluminio, etc.) purificando el agua a través de una membrana semipermeable. En ocasiones se requiere una bomba de presión para ayudar a incrementar el caudal de agua, que pasa a través de una membrana, dejando atrás las bacterias, virus y contaminantes químicos como cloro, sulfato, calcio, cloruro. De esta forma se aumenta la calidad del agua.
Todas las fuentes de ósmosis disponibles en nuestro catálogo necesitan toma de agua y toma de electricidad. Algunos modelos también requieren de una toma de desagüe.